El whisky irlandés West Cork Single Malt Sherry Cask Finished se elabora con cebada malteada al 100 % y se destila en lotes pequeños. Se madura con paciencia en barricas de bourbon de primer llenado y se termina en barricas de jerez de Bodegas Baron. No se filtra en frío y también se embotella sin colorante añadido al 43 %. Volumen: 43%. Aroma: Ciruelas pasas, higos, jerez y notas de vainilla Gusto: Dulce al principio pero luego termina seco con algo de picante presente.
La historia de Irlanda y el whisky van de la mano. Es una de las bebidas espirituosas más antiguas de Europa, donde se realiza la destilación desde el siglo VI. Cuando los monjes religiosos llevaron por primera vez la técnica a Irlanda, la utilizaron para crear perfumes y “Eau de Vie”, también conocida como “Agua de vida”. Los primeros registros escritos de whisky en Irlanda se remontan a 1324 y provienen de un manuscrito medieval llamado el libro rojo de Ossory, que muestra el Uisce
Beatha produciéndose para el consumo. En el siglo XIX, Irlanda estaba a la vanguardia de la producción de whisky, suministrando el 60% del suministro mundial.
En Irlanda, el whisky producido por destilación por lotes puede tener un destilado doble o triple. Hasta el 70% del sabor de un whisky procederá de la barrica en la que
se ha madurado. El whisky irlandés debe madurar en barricas de madera de no más de 700 litros, en la isla de Irlanda, durante un mínimo de tres años